Por favor 2017 se bonito

Adiós 2016.

Digo adiós a un año cargado de emociones fuertes, de más bajadas que subidas, de más subsuelos  que puentes emocionales, pero sobre todo digo adiós a un año en el que he disfrutado jugando con mi yo más íntimo. Un año en
el que me he atrevido a hacer lo que verdaderamente quería, he llegado a abrirme en canal escupiendo mis sentimientos a personas que tal vez no se lo merecían y a un año en el que me he atrevido a alejarme, a alejarme
de la seguridad de mi hogar para ir en busca de un sueño que, aunque roto, por lo menos me ha hecho despertar, darme cuenta de que el miedo no puede impedirte  correr, salir de la tan cómoda zona de confort.

A veces hay que decir adiós, duele, pero las etapas son eso, fases que empiezan y se acaban, fases que nos dejan lecciones, que nos hacen ser más fuertes aún, que nos hacen llorar para que al final llegue el vacio, ese vacío
emocional que te aporta el olvido.

Terminar el año llorando no indica nada malo, solo viene a decir que te acuerdas de personas que no están y que te gustaría que estuvieran, de personas que fueron pero que ya no son y que tu fortaleza no deja de ser tal por llorar, todo lo contrario, hay que ser muy valiente para reconocer sentimientos, derrotas y llorar, porque nadie te lo impide, es sano.

Hola 2017.

Empezar el año con lágrimas...eso sí que no indica nada bueno, pero qué coño...tengo todo un año por delante para ir emendando y cosiendo todas y cada una de las heridas que dejó el 2016.

Seguiré siendo la misma porque a pesar de que en algunos aspectos no me vaya del todo genial, ser yo al 100% es lo que más feliz me hace, sonreír, correr, escuchar música a deshora, estudiar para lograr sueños, planear viajes a lugares recónditos, soñar con encontrar a un loco que me siga en cada una de mis locuras...en definitiva, espero mucho de ti 2017, no me defraudes porque yo no lo haré.

Una  lunática pretendiendo ser normal :)


Resultado de imagen de adios 2016